Tengo una perra... y tengo un hamster... la perra odia al hamster y cuando no le dejo que lo vea, llora... y si la saco de la habitación para que no llore, no llora, ladra... y mucho... y el hamster duerme, duerme todo el día... y corre en su rueda por la noche... así que es como si no tuviera hamster... por que no lo veo... por que duerme en su casita... pero tengo que limpiarlo igualmente... al puto hamster... que por otra parte es un cagón, no por que cague mucho, que también, sino por que se asusta hasta del aire... y mi perra sigue ladrando ahí fuera... la maldita perra histérica... ...y para colmo ni uno ni otro me echan una mano con el blog... malditos animales... y se supone que nosotros somos los inteligentes. A todo esto he pillado un catarro de campeonato, y me duele la cabeza y los ojos a todas horas... y sigue, sigue ladrando... no se quedará afónica la muy p... noooo, antes me quedaré afónico yo de gritarle que se calle... los odio. La vida sería mejor si los hamster vivieran de día y los perros se callasen cuando se lo dices.
Necesito un poco de silencio.